Me niego a pensar que te has ido.
Sé bien que una tarde cualquiera
volverás a mi puerta
cargado de sonrisas.
No quiero perder los sueños.
Creer que te has ido
es negar que existe la esperanza.
Es olvidar las caricias,
la ternura,
el poema.
Caracas, 25 de febrero de 2010
1 comentario:
dando un vistazo y leyendo tu blog
saludos desde Reus Catalunya
un abrazo
Publicar un comentario